domingo, 9 de febrero de 2014

Martin Niemöller: "Cuando los nazis vinieron por los comunistas..."

Cuando los nazis vinieron a llevarse a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista,

Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata,

Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista,

Cuando vinieron a llevarse a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío,

Cuando vinieron a buscarme,
no había nadie más que pudiera protestar.

Este poema, de Martin Niemöller, un pastor luterano, nos recuerda la importancia de luchar contra los abusos y la injusticia allá donde la veamos, aunque no seamos víctimas de dicho abuso.

A día de hoy podemos encontrar abusos e injusticia simplemente con poner un pie en la calle. Casi todas las semanas hay manifestaciones en las principales ciudades de este país. Precariedad laboral, precariedad sanitaria, educativa y económica. Tal vez pienses que son cosas que a ti no te afectan, pero tal vez algún día si lo hagan y entonces no quede nadie para defenderte.



 P.D.: Por cierto, me encantan las réplicas, si son educadas y fundamentadas, así que anímate a contestar... agradezco los comentarios y son bienvenidos. Por otro lado, si encuentras algún error o dato complementario que crees que debería aparecer en esta entrada, no dudes en comentármelo. Muchas gracias, y espero que te haya gustado... o cabreado.

Y si te ha gustado este artículo pero te da pereza ponerte a contestar, por favor, pincha en las etiquetas de blogger, twitter o facebook. Es muy facil, rápido, y ayudas a que este blog sea conocido. Estaré eternamente agradecida.

miércoles, 5 de febrero de 2014

No Quiero Ver a los Políticos Bailando, Cantando o Regalando Sardinas

 
Es algo que siempre me ha horrorizado. Se acercan las elecciones (o se ha destapado un escándalo de corrupción, o la última encuesta de intención de voto es desastrosa, o etc), y todos los partidos políticos se lanzan como locos a la carrera por ganar votos de las formas más variopintas. Políticos cantando, políticos bailando, políticos contando chistes, regalando flores, sardinas...
 
Yo no espero esto de los políticos. Yo quiero que los políticos trabajen. Quiero tener la sensación de que el político está las 24 horas del día los 365 días del año preocupado por solucionar los problemas de la ciudad, provincia, comunidad, o país. Ya sé que no es así, y que como personas que son también cantan, bailan cuentan chistes... pero ni necesito ni quiero saberlo.
 
Lo que más me preocupa es que intuyo que una parte de la población no piensa como yo, y que efectivamente vota al político más simpático, al más marchoso, o al que regala más sardinas, bocatas o lo que sea.
 
Mientras este tipo de votantes no sean una ínfima minoría, seguiremos en esta especie de chiste de mal gusto de país. Yo personalmente, como donostiarra que soy, cada vez que me cruzo con un político, del color que sea, en la tamborrada, se me corta un poco el rollo. Seré rara...
 
¿No os creéis lo que os digo? Mirad, mirad aquí y buscando un poco en Google seguro que encontráis más.
 


 P.D.: Por cierto, me encantan las réplicas, si son educadas y fundamentadas, así que anímate a contestar... agradezco los comentarios y son bienvenidos. Por otro lado, si encuentras algún error o dato complementario que crees que debería aparecer en esta entrada, no dudes en comentármelo. Muchas gracias, y espero que te haya gustado... o cabreado.

Y si te ha gustado este artículo pero te da pereza ponerte a contestar, por favor, pincha en las etiquetas de blogger, twitter o facebook. Es muy facil, rápido, y ayudas a que este blog sea conocido. Estaré eternamente agradecida.